domingo, 15 de mayo de 2011

Que se oigan tus pasos por el pasillo

No tienes coche, ni cama, ni nada de nada,
tampoco besos de sobra para darme a mí,
no quieres verme sufrir o te faltan palabras
y yo me muero de ganas de ganarte a ti.
No voy, ni vengo, ni salto, ni cambio de rama,
prefiero estar cuando vuelvas, si quieres venir,
me gusta verte reír aunque a veces me matas,
me pierdo por un momento y regreso a por ti.
Aplazado, de nuevo inacabado.
Agotada, no sé si podré dar más.
Despistada, proyecto rechazado.
Atontada, después de aterrizar.
Descartado el dormir a tu lado.
Castigada, está prohibido pensar.
Destronada y quemando lo quemado.
Infectado por ti cualquier lugar..que hayamos pisado.

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