Querida felicidad:
No sé si llegarás a leer esto, por que ya no confío en el cartero de la esperanza. Bueno, quería decirte que te echo mucho de menos, desde el día aquel en el que me presentaste a tu amiga tristeza, no he vuelto a saber nada de ti ya que te fuiste sin avisar y sin ni siquiera decirme a donde ibas para irte a buscar.
Tengo que confesarte que me haces mucha falta para sobrevivir, no sabía lo que valías hasta que te perdí. Creo que debería destacar que he echo lo imposible por encontrarte, pero por lo que he escuchado, eres una experta en esconderte..
No hay comentarios:
Publicar un comentario